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Odio muchas cosas de mí, tanto físico como el carácter. Intento cambiar pero, cuando estás acostumbrada a ser como eres es muy difícil. Pero no me rindo, lo sigo intentando, a toda costa. Quiero muchas cosas que no tengo, y eso frustra. Creo que ese, es uno de los principales problemas de las personas, y como no, yo soy una de esas personas. 
Estoy depresiva, necesito divertirme, salir, jugar, bailar, cantar, reírme, ir a la playa, salir de noche, conocer gente, beber, ligar, pasar una noche increíble e inolvidable, y en general, disfrutar. Estoy tan arta de la rutina. A veces me quedo despierta en la cama pensado en cuando era pequeña, sin preocupaciones, sin tener que pensar que te pones mañana para salir, o para ir al instituto. Sin importarte que piensan los demás de ti, que en realidad, muy en el fondo te importa, por lo menos lo que piensa el chico del que estás enamorada. A la vez que creces te vas dando cuenta de lo dura y lo jodidamente difícil que es la vida (y de las guarras que hay por ahí sueltas, eso nunca falta). Te das cuenta de que si quieres algo, tienes que luchar por ello, que no te lo regalan. 
Siempre hay una canción que me anima y que a la vez me deprime, es extraño. A Drop In The Ocean- Ron Pope
Puedo tirarme llorando 5h escuchando y, aunque es lenta, ¡bailar!
Se que esto no tiene nada que ver con lo que estaba hablando hace un momento, sobre la vida y todo eso, pero es que estoy tan cansada de todo, que ya me da igual.
He oído que los sueños siempre se cumplen, aunque no sean en vida, tal vez mis sueños todavía no se deban de cumplir, por ahora, quién sabe...